Emotivo «Entierro de la Sardina» en Mojácar

Mojácar vivó con “dolor” el tradicional entierro de la sardina, cumpliendo la tradición que marca el final de los Carnavales y el comienzo de la Cuaresma.

Por primera vez en Mojácar también se escenificó la batalla sostenida entre Don Carnal y Doña Cuaresma, conocida alegoría escrita en 1330 por el Arcipreste de Hita en el Libro del Buen Amor.

Miembros del grupo de carnaval “Los Implicados”, representaron en el Edificio de Usos Múltiples el reto entre ambos contrincantes y la derrota de Don Carnal frente a tan austera rival.

Tras la batalla, a las 20,00H, se procedió al solemne entierro de la sardina que este año iba acompañada por varios ninots que acompañaron al pez en su destino final.

Multitud de vecinos y visitantes acompañaron al cortejo fúnebre en el que cabe destacar la mayor participación, cada año, de los vecinos de otras nacionalidades, integrándose a las tradiciones locales.

Numerosas plañideras y dolientes acompañaron, en su últimos adiós, a tan querida sardina, en los que no faltaron ni las velas ni las letanías que, marcadas por el “cura” oficiante del entierro, eran contestadas con fervorosa aflicción por los asistentes. A cada Santo, su petición pertinente.

Durante todo el trayecto, la Banda de Música de Mojácar puso música al broche final de los Carnavales.

Unos carnavales que este año ha contado con novedades y que amplía su programa de actividades y de participación.

Y como las “penas con pan, son menos penas”, un buen chocolate caliente con sus correspondientes churros, ofrecidos por el Ayuntamiento, sirvieron de consuelo al el público asistente una vez concluida la quema de la difunta la sardina.